Esos insaciables celos del pasado de la pareja….¿los conoces? ¿has sido vìctima de ellos? (tanto estando en un lado como en el otro de la relación). Quizà has caìdo en ese laberinto interminable de los celos retrospectivos. Esos celos que sufren muchas personas referidos no ya solo al aquí y ahora, sino al ayer de su pareja.
Por si no es suficiente la inseguridad del presente, aparece el pasado de la pareja como un huracán que arrasa por completo con la tranquilidad, la paz mental y la seguridad interna. Y no es que aparezca repentinamente, es que muchas veces se busca. Se busca morbosamente cada detalle de las historias y relaciones que esa persona ha vivido cuando no estaba con nosotros.
Los detalles se hacen siempre insuficientes para el mosntruo hambriento y voraz de los celos. Nunca es suficiente. Es como una suerte de vertedero donde todo entra, donde todo es bienvenido. Hasta un punto de autèntico desquicio. No vale con saber las relaciones de la pareja actual. Hay que conocer cada detalle de esas relaciones.
Los celos del pasado o ese mosntruo hambriento que nunca se sacia
Por supuesto una de las obsesiones es saber còmo era físicamente esa persona. Còmo era su forma de ser, còmo le trataba, còmo le hacìa sentir… Muchas personas se estarán preguntando ¿para què? ¿Es una especie de masoquismo? La lógica de una mente “puramente” racional sentarìa cátedra con un… “¿para què quieres saber su pasado si èl ahora te ha elegido a ti?”
“El pasado, pasado està. No hay que preocuparse por èl. ¿Y si quisiera volver a su pasado? Pues que vuelva. Tù ya sabes què hacer entonces” Quizà estas palabras las hayas escuchado en alguna amiga, o amigo. En esa persona racional que intenta poner filtro y lìmites a tanto desorden mental y emocional.
Pero què hay detrás de esta autèntica obsesión sobre el pasado emocional de la pareja… O al menos la pregunta que uno puede hacerse es què estamos buscando al acumular esa información. Datos, datos y màs datos. Cuantos màs mejor, porque nunca es suficiente para el hambre de este enorme monstruo.
La inseguridad en uno mismo es la base de todos los celos
De alguna manera, aparece una necesidad de querer ser la única persona en la vida de nuestra pareja. Pero, ¿què hay detrás de querer ser la única persona en su vida? Hay una gran inseguridad de base. La propia estima està derribada. Necesitamos buscar afuera la seguridad que no habita en nosotros. Algo que nos desestabiliza por completo.
Buscamos desesperadamente datos que nos confirmen que somos nosotros los únicos. Los màs maravillosos y especiales del mundo entero. Que por algún azar extraño esa persona ha vivido una “vida” alejada de nosotros (su verdadero y único amor) antes de conocernos.
La dependencia es consecuencia de esta brutal inseguridad. Si mis cimientos están derruidos, buscarè desesperadamente algo que los afiance fuera de mì. Buscarè a alguien que me sirva de espejo. Que me refleje todo aquello que yo no soy capaz de ver ni valorar por sì misma. Y me aferrarè a ese espejo hasta la toxicidad emocional y mental.
Dependemos cuando no hemos aprendido a cuidarnos por nosotros mismos
Todos los medios están justificados para mi fin. Porque, piensa en esto… ¡menudo FIN!. No es un fin cualquiera ni pequeño. Es mantenerse vivo a cualquier costa. No desaparecer. Que la inseguridad voraz que siento no me carcoma hasta la inexistencia. Y sy tengo que recurrir a agarrarme a una persona a toda costa, lo harè. Porque si no, yo desaparezco. Yo no soy nadie.
Realmente tener celos del paso de la pareja es un problema muy habitual y deberíamos tener una mirada que intente ir màsallà de este hecho. Todo tiene un sentido. Es este sentido el que hay que buscar y atesorar. Para poder finalmente revertirlo en una manera de ayudarse, construirse, cuidarse y quererse por quien eres. Porque compararse con los demás es un ejercicio infructuoso de ecos amargos.
La comparación es inútil, porque todos somos distintos. Cada persona es única e irrepetible. Valòrate y quiérete desde esa diferencia. Pero empieza desde esa raíz y mìralo todo con claridad. No te dejes cegar por argumentos que han carcomido tu salud mental. Cuìdate mucho. La batalla de acabar con los celos no es una tarea fácil, es luchar contra un titán que estàenrraizado a lo màs profundo de nuestro ser.
Por: Alicia Garrido Martìn