Para muchos, la pareja es un freno en vez de una fuente de energía, un lugar incómodo en vez de confortable. Esto ocurre porque aún pervive la concepción de pareja como un lugar, en esencia, para concesión y el sacrificio permanente. Te animo a que te preguntes, sin testigos de por medio, si tú participas de esta idea, si conoces a alguien que lo hace. Así, ¿cuál es tu visión personal de la relación de pareja en cuanto al éxito y el crecimiento personal? ¿Y la de las personas que te rodean?.
En este artículo hablaremos sobre cómo es una relación de crecimiento (en este caso una relación de pareja), qué características tiene y así podrás ser capaz de tener las herramientas para conseguirlo.
Verás paso a paso por qué sí es posible tener relaciones en donde sientas que creces como persona, relaciones que te permiten ampliar de tu zona de confort. Quizás no sea fácil de alcanzar, pero sí posible; además, la inversión merecerá la pena.
¿Cómo es una relación de crecimiento?
La relación saca lo mejor de ti
Las relaciones personales pueden sacar lo mejor y lo peor de nosotros, e incluso pueden hacer que nos alternemos en los dos extremos. Por otro lado, no estamos hablando de una felicidad constante y “falsa”: en ella también habrá momentos malos o instantes de muchas dudas. Sin embargo, te das cuenta de que una relación de pareja favorece tu crecimiento cuando, al observar -cogiendo cierta distancia (adoptando el modo espectador)-, te das cuenta de que constituye un estímulo da paso a una versión que te gusta de ti.
¿Qué quiere decir que la relación saca lo mejor de ti (relación de crecimiento)? Quiere decir que es una relación que hace que te esfuerces por sentirte bien, que te hace reír y te permite conectar con los buenos momentos del día a día. Cuando una relación saca lo mejor de ti esto se manifiesta en que pienses en planes de futuro, que te ilusiones con hacer que la relación crezca y se haga cada vez más sólida e íntima.
Cuando la relación de pareja te permite crecer es cuando al observar desde la distancia, la mayoría de las veces tu pareja saca lo mejor de ti.
La pareja y los retos profesionales
Poder crecer a nivel profesional y asumir retos muchas veces representa tomar riesgos, dedicar gran parte de tu tiempo a tu profesión o a tu proyecto personal, tal y como se explica en un estudio publicado por la
Asociación Americana de Psicología (Ackerman, Griskevicius, & Li, 2011). Y en este contexto la pareja puede ser un impedimento. Es decir, tener pareja puede ser un apoyo o una “cadena”, tu pareja puede ayudar a que despliegues tus alas o puede que te mantenga estancado/a y no te ayude a progresar.Tienes que escoger cuál de las dos realidades quieres para ti.
En este sentido, una pareja con una relación de crecimiento es aquella en la que los retos profesionales se comparten y uno alienta al otro. De hecho, tu pareja puede ayudarte a que te propongas retos profesionales, puede buscarlos contigo, puede ayudarte a que tus ideas tomen forma e incluso puede disfrutar contigo de todo este proceso. Más allá de que se esté de acuerdo o no en el paso que se va a dar, se valora que la felicidad y el crecimiento del otro pasa por alcanzar ciertos retos y por tanto, se le alienta y se le apoya.
Equilibrio: espacio personal y espacio de pareja
Estar en una relación de pareja que implique el crecimiento representa ser parte de un proyecto que te permita mantener tu individualidad, atender a tus necesidades personales y mostrarte tal y como eres. Y a la misma vez, te sientes parte de la vida del otro, sabes que tienes derecho a la individualidad y no te sientes culpable por tener tu espacio personal y disfrutar de ello. Dicho de otro modo, una relación de crecimiento es una relación de libertad sin culpabilidad.
En este punto, cabe destacar que una vida en pareja entraña retos que, dependiendo de cómo los enfoquemos, pueden favorecer nuestro crecimiento o hacer que nos estanquemos. Por ejemplo, convivir con alguien puede ayudarte a crecer porque tendrás que enfrentarte a situaciones en las que gestionar emociones poco deseables, como el enfado y la frustración.
Así mismo, en un artículo científico de revisión se llega a la conclusión de que los humanos al vivir en pareja tienen que poner esfuerzo en alcanzar un equilibrio entre su espacio personal y el que comparten con su pareja (Fletcher, Simpson, Campbell, &Overall, 2015). De este modo, la pareja puede ser el mejor escenario para que mejores a nivel personal, para que gestiones tus límites y elimines las barreras que te impiden constituir una dinámica sin demasiadas disonancias.
A modo de conclusión, si para ti tener pareja representa ataduras, límites y estancamiento, hay algo que no va bien. Es cierto que una pareja requiere un tiempo y esfuerzo que no podrás dedicar a otros aspectos de tu vida personal, pero ten presente que una relación de pareja puede ser el motor de tu crecimiento y el apoyo en los momentos más complicados.
Estar en una relación de pareja que implique el crecimiento representa ser parte de un proyecto que te permite mantener tu individualidad, atender a tus necesidades personales y mostrarte tal y como eres.